Con Evo Morales ocurre lo mismo que con Pepín Blanco, actual Ministro de Fomento español, para tomártelos en serio es mejor que no los veas.
El Presidente Boliviano dio por finalizada la huelga de hambre iniciada el pasado jueves con la que pretendía presionar al Congreso de Bolivia para la aprobación de una Ley Electoral con la que se crearían 14 nuevos distritos electorales para los pueblos indígenas.
En el día de ayer se promulgó una Ley de Régimen Electoral Transitorio, un apaño que permite crear ocho nuevos distritos para los indígenas y desalojar a los campistas del Palacio Presidencial de la Paz, consiguiendo así que deje de parecer una facultad española contrariada con el Plan Bolonia.
Evo Morales consigue su objetivo, no en vano ya había indicado que estaba dispuesto a todo, incluso a ponerse corbata.
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