Los niños del mundo tienen hoy un nuevo héroe al que admirar, y ese no es otro que el Gran Presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, que emulando a los presidentes de las películas cogió su avión y viajó a un lejano y peligroso país de onomatopéyico nombre conocido como Chad, para liberar a tres periodistas franceses y cuatro azafatas españolas.
La cuestión no era sencilla, los retenidos corrían el riesgo de ser acusados de cómplices del secuestro de 103 niños, supuestamente realizado por miembros de la ONG “El arca de Zoe”. Parece ser que esta ONG tenía previsto gestionar la adopción de estos niños de forma fraudulenta.
Los liberados por Sarkozy eran periodistas franceses que acompañaban a la ONG y parte de la tripulación del avión de la compañía aérea Girjet, todos españoles, que se encargaría del transporte y que no tienen nada que ver con la cuestión de los menores.
En un acto digno de elogio, Sarkozy realizó una escala nocturna en España para entregar personalmente a las azafatas y homenajeando a Casablanca partió, convertido ya en objeto de deseo, en su avión camino de París, mientras Zapatero le despedía en la pista.
Recordamos a todas las mozas solteras que el apuesto y valiente Presidente galo se ha separado recientemente de su esposa, tiene trabajo estable, buen y compacto porte, es amigo de sus amigos, amante de las marchas militares y las chanclas.
Busco a Sark's
La cuestión no era sencilla, los retenidos corrían el riesgo de ser acusados de cómplices del secuestro de 103 niños, supuestamente realizado por miembros de la ONG “El arca de Zoe”. Parece ser que esta ONG tenía previsto gestionar la adopción de estos niños de forma fraudulenta.
Los liberados por Sarkozy eran periodistas franceses que acompañaban a la ONG y parte de la tripulación del avión de la compañía aérea Girjet, todos españoles, que se encargaría del transporte y que no tienen nada que ver con la cuestión de los menores.
En un acto digno de elogio, Sarkozy realizó una escala nocturna en España para entregar personalmente a las azafatas y homenajeando a Casablanca partió, convertido ya en objeto de deseo, en su avión camino de París, mientras Zapatero le despedía en la pista.
Recordamos a todas las mozas solteras que el apuesto y valiente Presidente galo se ha separado recientemente de su esposa, tiene trabajo estable, buen y compacto porte, es amigo de sus amigos, amante de las marchas militares y las chanclas.
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