Hay una película genial, titulada “Atrapado en el tiempo”, en la cual Bill Murray está condenado a vivir una y otra vez el mismo día de su vida.
Si atendemos a las ofertas culturales más rutilantes de los últimos tiempos, nosotros también podemos tener la sensación de que nos hemos quedado atrapados en algún momento indeterminado de los 80, las novedades en forma de Rockys y Rambos en la estantería del video club y hace cuatro días en la cartelera, el lanzamiento a bombo y platillo del último disco de Madonna , el anunciado regreso de New Kids on the Block, o la nueva versión del Coche Fantástico, nos confirman que si Bill Murray vivía atrapado en el día de la marmota, nosotros lo estamos en el de los santos inocentes.
Pero también es verdad que no todos los reestrenos van a ser iguales, para muestra el retorno de Indiana Jones, que nos ha llenado de ilusión a todos. Vuelve el héroe por excelencia protagonizado de nuevo por Harrison Ford, en una película que llevará por título “Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal” dirigida, como no, por Steven Spielberg y que se estrenará en todo el mundo el día 22 de mayo.
Al parecer, Harrison Ford término el rodaje de Indi con agujetas hasta en las canas de las orejas, tanto es así, que cuando George Lucas, productor de la película, le insinuó la posibilidad de retomar su personaje de Han Solo, para una hipotética nueva entrega de “La Guerra de las Galaxias”, el actor arrojó su teléfono móvil al fondo de una alcantarilla y se mudo a un coqueto bungaló de Polaris World en Murcia, muy cerca de la playa, donde se recupera rodeado de campos de golf, estanques, piscinas y spas, a pesar de la pertinaz sequía que asola la región.
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